Abuquet!

Después de las decepcionantes últimas películas basadas en videojuegos (Hitman, Max Paine, D.O.A., Street Fighter: La Leyenda de Chun Li) no le daba muchas esperanzas a la adaptación de la popular franquicia de Prince of Persia. La semana pasada fui a ver la última superproducción de Jerry Bruckheimer al cine y debo decir que el resultado ha sido mejor de lo esperado.
La historia esta basada en el juego del 2003, Prince of Persia: Las Arenas del Tiempo: Dastan (Jake Gyllenhaal) es un querido príncipe que fue adoptado por el rey de Persia de pequeño. Participando junto a sus dos hermanos en el ataque a una ciudad consigue apoderarse de una mística daga. En la celebración de la victoria su padre es asesinado y él es culpado por lo que escapa junto con la princesa (Gemma Arterton) de la ciudad invadida. Con ella descubre el poder de la daga para viajar atrás al tiempo y, suponiendo que ésta es la causa de sus problemas, decide buscar al verdadero culpable y limpiar su honor.

De esta manera la cinta nos transporta al mágico reino desértico de Persia, uniendo acción, comedia, misterio y romance de manera muy acorde a los videojuegos lo que es de agradecer. Merecen especial mención las varias y asombrosas acrobacias introducidas en las peleas y persecuciones, que no podían faltar. En efecto el diseñador envió un video con escenas del juego al director de la película para que comprendiera en que consistía el videojuego y es perceptible que ha rendido sus frutos.

La historia es bastante sencilla, muy de cerca de la del juego de plataformas, y aunque no se necesita de una historia compleja para hacer una buena película de aventuras, siento que han podido hacerla mas interesante. Desde el inicio la identidad del villano era evidente y el desenlace, a pesar de ser satisfactorio, no presenta mayor sorpresa. Las actuaciones son buenas y realmente les dieron vida a los personajes con fidelidad.

Por otro lado es algo desorientador el acelerado ritmo de la película, pasando de una escena a otra dando grandes saltos en el tiempo o recorriendo grandes distancias sin que la transición sea evidente. De igual manera no me gustó como montaron las escenas de acción, ya que algunas peleas se presentan rápida y desenfocadamente tal que, sumado a los efectos especiales, ocasiona que sea difícil entender exactamente que esta pasando en pantalla (¿efecto transformers?).

En fin, tenemos una película correcta que cumple con lo prometido, definitivamente satisfará al público general y es esperanzadora para el gamer acostumbrado a ver como pisotean a sus videojuegos favoritos en la gran pantalla. Probablemente se estén planeando otras secuelas, como Disney ya ha hecho antes con Piratas del Caribe (del mismo productor), en las cuales esperemos resuelvan sus fallos de esta primera parte.

Bonus: En este video los chicos de Mega64 demuestran la utilidad del poder de la daga.